Zona mixta.

Se halla al NO de Pamplona, al pie del monte Zabalgaña. Limita al N con Ochovi, al S con Olza, al E con Aldaba y al O con Lete.
Efectuada la concentración parcelaria (1976): 76 Ha, 12 propietarios, 267 parcelas antes y 36 después. Comunes, 77 Ha (29 de pastos).

En el siglo XI aparece documentada como «villa» de señorío del linaje de Oteiza. Sancho Oriol la dio al monasterio de Leire (1087), pero sus nietos Aznar y Sancho Jiménez de Oteiza lograron, en pleito ante el rey, que les fuera devuelta (1095). Las pechas del lugar pertenecían dos siglos después a Fortún Almoravid a quien en 1280 ya se le habían confiscado por la cuantía anual de 3 cahíces de trigo, lo mismo de cebada y otro tanto de avena, más 15 sueldos por la venta de vino. Los Hospitalarios de San Juan de Jerusalén habían adquirido (1222) un pechero. Los labradores debían en 1427 a diversas instituciones eclesiásticas un total de 11 cahíces 3 robos de trigo al año.
Al término se le calculaban en 1849 hasta 619 robadas, de ellas 600 en cultivo (100 de primera calidad, 200 de segunda y 300 de tercera). Rendían comúnmente 4 por 1.

Domina la localidad la Parroquia de San Martín, sencilla construcción de nave única y cabecera plana cubierta por bóveda de medio cañón sobre arcos fajones que apean en las habituales ménsulas de influencia cisterciense. En los últimos años del siglo XVI Jerónimo de Navascués ejecutó una cruz parroquial y Gastelúzar un sagrario que todavía se conserva, pieza estilísticamente poco avanzada. La talla de la Virgen puede fecharse en el siglo XIII.