Otazu
Historia
Lugar, coto redondo de propiedad particular y antiguo señorío del municipio de Etxauri, en el histórico valle de este nombre, Cuenca y Merindad de Pamplona.
Aparece documentado ya como apellido locativo en 1098. Fue lugar de señorío realengo hasta que el rey Teobaldo I lo dio (1234) con otros pueblos a Toda Rodríguez a cambio de Cortes y su castillo. El monasterio de Irache y los Hospitalarios de San Juan de Jerusalén poseyeron heredades en su término desde el siglo XIII.
En 1608 el señorío de Otazu era de don Pedro Berrio y Otazu, permaneció como lugar de señorío hasta la desaparición de este tipo de regímenes en la primera mitad del siglo XIX; aunque a principios del siglo XIX se gobernaba como realengo, al igual que otros pueblos del valle de Etxauri. Pertenecía entonces al marqués de Góngora. El señor ejercía asimismo el derecho de presentación del párroco. Al suprimirse las jurisdicciones señoriales y efectuarse las reformas municipales de 1835-1845, Otazu quedó en el ayuntamiento de Etxauri. En 1988, el lugar pertenecía a la Empresa Semillas Ebro.
Palacio
Figuraba como de cabo de armería en la nómina oficial del Reino. Era un linaje de rancia nobleza. En 1351, Gil García de Yániz, señor de Otazu, era lugarteniente del gobernador de Navarra. A principios del siglo XVI, el viejo solar había pasado a la familia Berrio. En 1568, Pedro de Berrio, señor del palacio, percibía 30.000 maravedís de acostamiento, siendo a la vez alcalde del mercado de Pamplona, con privilegio real para cobrar por dos conceptos. Su hijo don Hernando percibía dicha renta en 1585. Según un informe de la Cámara de Comptos, en 1723 pertenecía, junto con el de Larraya, a don Francisco de Ezpeleta. Solicitó rebate de cuarteles en 1781 don Miguel Antonio de Ezpeleta Jiménez y Loyola. En 1788 figura en las Descripciones de Navarra como señorío propio del marqués de Góngora. Según el Libro de Armería, su antiguo escudo era un creciente renversado, bordeado de un jaquelado de dos series, de oro y sable, y campaña de plata bordada de lo mismo.
La construcción es de piedra, con puerta de arco ojival, galería de arcos de ladrillo y garitones. En 1525 pertenecía a don Pedro de Berrio. En el siglo XVIII paso de los E¬peleta al marqués de Góngora.
Enlaces a archivos de interés:
Archivo General y Real de Navarra
Archivo Diocesano del Arzobispado de Pamplona y Tudela
Portal de Archivos Españoles (PARES)
Enlaces a hemerotecas de interés:
Hemeroteca del Diario de Navarra
Hemeroteca del Diario de Noticias
Hemeroteca de la Biblioteca Nacional
Iglesia de San Esteban
Es un edificio románico de transición al gótico (ca. 1200) realizado en piedra, recrecido en el siglo XVI sin que afectara a su interior. Consta de nave única dividida en tres tramos y cabecera semicircular. Se cubre con bóveda de cañón apuntado sobre fajones en la nave y con bóveda de horno de directriz apuntada en la cabecera.
Al exterior una imposta que recorre el ábside a cierta altura de los muros señala el final de la zona románica, subrayada por los contrafuertes que articulan verticalmente la cabecera. La torre campanario se sitúa a los pies sobre el primer tramo de la nave.
La puerta de acceso, abierta en el segundo tramo del lado de la epístola, tiene forma de arco ligeramente apuntado con arquivoltas que apean en tres parejas de columnas con capiteles tallados con hojas y pomas estilizadas. Posee dintel decorado con crismón que apea en sendas ménsulas labradas con medias figuras de toro y león, respectivamente. En el presbiterio, sobre el altar mayor, se encuentra una imagen gótica de la Virgen con el Niño, en posición sedente. Se trata de una talla importante tanto por el tamaño como por su buen estado de conservación (a falta de la policromía original), estilísticamente próxima a las de Bargota y Eriete, y por ello incluirle dentro del grupo dependiente del taller de Estella, del último tercio del XIII y comienzos del siglo XIV.
El retablo mayor es una magnífica obra de escultura de estilo plateresco que por su parentesco con el retablo de la localidad próxima a Ubani, datado en 1554, cabe fechar a mediados del siglo XVI. Carece de sagrario y ha sufrido repintes en su policromía, lo que no impide reconocer en él la mano de un gran escultor influido por el renacimiento norteuropeo. El retablo se compone de banco, cinco calles, cuatro entrecalles, dos pisos y ático, que se ocupan con figuras exentas y relieves de distintos tamaños, tallados con nerviosa agitación y finura. La mazonería se puebla de motivos de grutesco, balaustres y hornacinas aveneradas. En el piso primero se identifican a Santa Bárbara, San Mateo, San Lucas y Santa Catalina de Alejandría. En las entrecalles figuras de santos, apóstoles o profetas. En el segundo se encuentran la Inmaculada Concepción, San Marcos, San Esteban, ataviado de diácono y en posición sedente en el centro y, a tamaño mayor que el resto, San Juan Evangelista y Santa Lucía. En el tercero se encuentra Santa Águeda junto con otros santos no identificados. En el ático aparece el grupo del Calvario entre San Sebastián y San Cristóbal.
En el tercer tramo de la nave, uno frente a otro, hay sendos cuadros pintados sobre lienzo (2 x 1,50 m) de notable interés artístico. Son pinturas protobarrocas (ca. 1630) de un mismo taller, relacionables con la escuela madrileña de la primera mitad del siglo XVII. En el lado de la epístola se representa a Nuestra Señora de Montserrat, en posición sedente, con fondo de la sierra catalana y ángeles con flores. Le rinden homenaje un grupo de peregrinos a Santiago y otro de benedictinos acaudillados por su abad. El modelo iconográfico tiene su origen en obras barcelonesas del siglo XVI y el tipo fue recreado por Fray Juan Rizi durante su estancia en el Monasterio de Monserrat (1627-1640), en una serie de obras que obtuvieron gran éxito. En el lado del evangelio se representa a San Gregorio Magno, erguido, ante un fondo palacial y una vista de las almas del purgatorio liberadas con sus plegarias.
Enlaces de interés:
OBRAS DE REFERENCIA:
- Belasko, Mikel (1999).
Diccionario etimológico de los nombres de los pueblos, villas y
ciudades de Navarra. Apellidos navarros. Pamplona, Pamiela, pp.
267-268. - García Gainza, María Concepción (Dir.) (1985...): Catálogo Monumental de Navarra, Pamplona: Gobierno de Navarra.
- http;\www.navarra.es
- Jimeno
Jurío, José Mª (Dir.) (1990-1994). Toponimia y cartografía de Navarra –
Nafarroako Toponimia eta Mapagintza. Pamplona, Gobierno de Navarra. - Jimeno Jurío, José Mª (2004). Diccionario histórico de los municipios de Navarra. Pamplona, Pamiela, 2 vol.
- López Sellés, Tomás (1974): “Contribución a un catálogo de ermitas de Navarra”, en Cuadernos de
- Etnología y Etnografía de Navarra, VI, núm. 18, p. 492.
- Pérez Ollo, Fernando (1983): Ermitas de Navarra, Pamplona: Caja de Ahorros de Navarra.
- VV. AA. (1984). Enciclopedia Histórico-Geográfica de Navarra. San Sebastián, Instituto Geográfico Vasco – Haranburu.
- VV.AA. (1990). Gran Enciclopedia de Navarra, Pamplona: Caja de Ahorros de Navarra.
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OBRAS MONOGRÁFICAS:
Esta bibliografía se irá incrementando. Si dispones de referencias
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Enlaces de interés:
Red de Bibliotecas Públicas de Navarra
Fondo de Publicaciones del Gobierno de Navarra
Biblioteca de la Universidad Pública de Navarra
Biblioteca de la Universidad de Navarra
