Zona no vascófona.

Está situado en un declive con las estribaciones de la Peña Dormida, sierra de Codés. Limita al N con Acedo, al SO con Nazar y al SE con Mendaza.

Comunicaciones: Carretera local que enlaza con la comarcal NA-129 de Acedo a Lodosa.

HISTORIA. Antiguo lugar de señorío realengo al que concedió Teobaldo I ( 1238) su vinculación perpetua al patrimonio de la Corona. Aunque al mismo tiempo unificó sus cargas y las de Acedo y Villamera en la suma anual de 800 sueldos, esta cláusula no debió de hacerse efectiva; en 1280 entregaban 20 cahíces de trigo, otros tantos de cebada, más 50 sueldos por "torta, carapido y fuentes" y 5 por el concepto denominado "vaca regis". Sólo en 1325 dispuso el gobernador Alfonso de Robray que, en lugar de sus diferentes pechas "de dineros, de pan, de vino, de gallina, de vaca regís y otras", abonasen 700 sueldos al año. Los monarcas Catalina y Juan III hicieron donación (1511) de sus rentas señoriales al mariscal Pedro de Navarra. Estuvo inscrito en el valle de La Berrueza hasta la configuración definitiva del municipio de Mendaza (1852).

En 1850 tenía escuela (dotada con 60 tobos de trigo) y 2205 robadas de tierra en cultivo; 800 de viña. En las inmediaciones de Asarta, se dio en diciembre de 1833 «la primera batalla formal» entre los carlistas y los cristianos. Por otra parte, en pleno siglo XX la Junta local de Beneficencia seguía repartiendo entre los desvalidos de la comarca los intereses del capital de la fundación que con tal fin instituyeron Juan Domingo González y su esposa en el Siglo XV.

Domina el reducido caserío, situado sobre un terreno abrupto, la parroquia de San Juan Bautista. Este templo es una iglesia gótico renacentista del siglo XVI que aprovecha estructuras medievales y a la que se añadió una portada neoclásica en el año 1790. La torre, iniciada por el cantero Francisco de Aizpolea, la concluyeron hacia 1700 José de Larramendi y Antonio de Usabinaga. El retablo mayor, de estilo rococó, se contrató con el arquitecto y escultor Miguel López de Porras hacia 1782 y lo doró diez años más tarde Santos Carrés, maestro de Orbiso; no obstante, el sagrario de estilo romanista puede identificarse con el que, según la documentación, efectuó Pedro de Troas a fines del siglo XVI.

ARQUITECTURA CIVIL. Se conserva la casa de la Fundación, del siglo XVI, y un escudo con las armas de los Fernández de Esquide.