Zona mixta.

Está situada en el extremo E del valle de Lizoáin y limita al NE con Janáriz y al SE con Acotáin.
Realizada la concentración parcelaria (1977): 301 Ha, 8 propietarios, 280 parcelas antes y 73 después.

Antiguo lugar de señorío nobiliario. La catedral de Pamplona adquirió por donación (1109) uno de sus «palacios» con las respectivas dependencias. Juan Díaz de Beortegui instituyó (1404) un mayorazgo con su «palacio» y demás bienes en el término.
Hasta los comienzos del XIX se gobernaba por el diputado del valle de Lizoáin y un regidor del pueblo elegido entre los vecinos. 

Iglesia de la Asunción

Edificio en estilo románico, realizado en piedra que fue restaurado hace algún tiempo. Tiene nave única dividida en tres tramos más la cabecera semicircular. Se cubre con cielo raso adintelado en el primer tramo de la nave, bajo la torre, con bóveda de cañón con fajones en los dos siguientes y con bóveda de horno en el ábside. El acceso se realiza por el lado de la epístola, a través de una puerta de arco de medio punto con arquivoltas sin decorar que protege un pórtico de reciente realización.
En su interior destaca la imagen gótica (ca. 1300) de la Virgen con el Niño, en madera policromada, situada en la ventana axial de la cabecera. Tiene como peana un sagrario decorado con relieves de Virtudes, hecho en madera, que pudo pertenecer al primitivo retablo mayor. Parece corresponder a principios del siglo XVII. A la misma época y con el mismo origen hay una talla de San José con el Niño en la pequeña capilla situada en el lado del evangelio.

Palacio

El palacio de este lugar aparece como de cabo de armería en la nómina oficial del Reino. En 1513, su poseedor Pedro de Beortegui, estaba ya entre los caballeros remisionados del pago de cuarteles, según el rolde del tesorero, en atención a la nobleza de su casa. En 1711 pleiteó contra el fiscal y patrimonial el palaciano Pedro Ángel de Aldunate, a causa del rebate de cuarteles. En la relación de la Cámara de Comptos, elaborada el año 1723, consta como propietario Juan María de Aldunate. En 1745 solicitó nuevo rebate su sucesor Joaquín de Aldu¬nate, y en 1760, su viuda, Narcisa de Izura. En 1767, Bernardo Antonio de Aldunate elevó una nueva solicitud, por medio de su apoderado, por ser el interesado a la sazón vecino de Tlaxcala, en el virreinato de Nueva España. Según consta en el Libro de Armería, en el siglo XVI el escudo era de azur con dos lobos de oro, puestos uno sobre otro.