CORAZÓN DE JESÚS, BLANQUEO DE LA CASA

Había costumbre en el pueblo de poner el Corazón de Jesús en las cocinas de las casas. El cura solía ir a casa a bendecirlo y se le ponían unas pastas. También había costumbre de blanquear las casas con cal. Había un hombre, un tal Urbiola, que se dedicaba a eso prácticamente todo el día. Muchos utilizaban azulete para que no quedase tan blanca. El blanqueador marcaba una cruz en las paredes que blanqueaba.